LA RÍA SIGUE BELLA, Y TRANQUILA, EL SOL RESPLANDECE, LA TEMPERATURA ES VERANIEGA...EN PRINCIPE YA APARECIÓ LA CASTAÑERA

Días hermosos los que nos está ofreciendo esta semana.
"Vamos de verano todavía", hace calor, el sol invita al paseo relajado.
Tdavía los castaños de Indias que adornan las calles viguesas siguen dejando caer los erizos y su fruto, también, al fin y al cabo es otoño, sus hojas.

Y ya aparecieron las castañas en las fruterías y las castañeras en el centro de la ciudad.
Nos devvuelven a la infancia, a las tardes de antaño, con un cucurucho de castañas asadas.
Castañas, asadas, crudas, pilongas, castañas para enriquecer la sopa.
Castañas para acompañar los asados.
Recordamos aquellas fiestas colegiales de "la castañada" que llegaban al final de Octubre.
Evocarán muchos los magostos de aquellos pretéritos años.
Anhelaran otros celebrar los magostos que se avecinan.

Olor que nos transporta hacia el pasado, el el aroma de las castañas asadas, envueltas en papel del periódico, calientes, sabrosas.

Como dar un salto en el vacío y volver al pasado.
Ya llegaron las castañeras, con sus cucuruchos de papel anunciando que llegará el frío, que se acercará hasta nosotros el tiempo de anocheceres tempranos...
Mientras disfrutamos del sol intenso, disfrutemos también de las castañas.
Y para que no se diga que la castaña no es manjar de altura, aquí les dejo una receta.
Y no teman engordar, dicen que esta que les ofrezco es ligerita (vamos a creerlo y no privarnos del placer de la castaña como postre)

• 500g de castañas
• 200 g dechocolate (70% de cacao)
• 100 g de nata fresca para cocinar
• 3 cucharadas soperas de fructosa
• 1 vaina de vainilla
• 7 cl de coñac

PREPARACIÓN:

Empezamos quitando las cáscaras a las castañas y las hervimos durante 5 minutos para poder quitarles la pielcon facilidad. Después, las cocemos a fuego lento en la leche con vainilla durante unos 30 minutos hasta que estén tiernas. Las escurrimos y las trituramos con el pasapuré.

A continuación, fundimos el chocolate al baño maría y añadimos el coñac. Mezclamos bien en un cuenco, el puré de castañas, el chocolate fundido, la nata y la fructosa.

Después, forramos un molde con papel de aluminio ligeramente engrasado, y vertemos en él la preparación. Cubrimos con papel film y dejamos que repose en la nevera por lo menos durante 5 horas.

Finalmente, desmoldamos y servimos en un plato sobre fondo de chocolate fundido. Se puede decorar con chantilly light

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Desde Vigo, como siempre, un cordial saludo. Hasta pronto.

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