EN ENERO, MÁS QUE NUNCA BUEN PUCHERO...UN POCO DE CHARLA CON MI VECINA DEL 5º B.

Mi vecina del 5º B, este año que acaba de comenzar, esgrime el "Calendario Zaragozano" como si del oráculo de Delfos se tratase.
Y por charlar un rato en el inicio de este larguísimo mes de Enero que iniciamos hoy, les dejo como titular, el primer refrán que leemos.
no está mal, si hace frío, un puchero reanima a cualquiera.
Pero hemos hablado de otras cosas mientras escuchamos el Concierto de Año Nuevo que transmiten desde Viena. Una tradición familiar que ella acaba gozosamente entre palmadas y tarareando.
Entre los propósitos para el nuevo año, me ha dicho que piensa hacer caligrafía, nada de empezar y no seguir. Ejem, ejem. Pero me lo creo.
Es más, sé que vista la nota que ayer les dejaba en el blog, supongo que lo decía con segundas intenciones...Vale, para no ser menos, atacaremos nosotros también la caligrafía.
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Se ha propuesto dominar las matemáticas. Creo que de eso sabe aunque no lo reonozca. También sé que lo que pretende es que me deje de filosofías, de poesía de ayer y de hoy y que me interese por las raices cuadradas y otras lindezas olvidadas o mal aprendidas.
Hemos estado practicando un poco. Sigue resultando un terreno olvidado y enigmático para mí, pero la amistad y el compañerismo ante todo...Qué le vamos a hacer!



En este el asunto de las frutas y verduras ya me muevo con más soltura. Si mi vecina del 5º B desea que comencemos el nuevo año con raices e integrales, raices cuadradas e integrales matemáticas incomprensibles.
A cambio le propongo raices comestibles, alimentos integrales. Y accede.
Seguimos con la charla, comentamos que aún no nos han bombardeado desde las TV con los fascículos. ya saben el rollo: coleccionar enanitos de porcelana, hacer maquetas de volcanes, en fin, esas cosas que nos ofrecen por euro y medio en el primer fascículo y que nadie finaliza...Cosas que arrinconamos y que compramos compulsivamente.
El segundo fascículo ya sube a 9,95 y el tercero, ya ni miramos.


Comenzaremos a comer bien, a comer de todo y estaremos sanos y adelgazaremos.
Bueno, no se rían, es otro de los propósitos de comienzo de temporada, de inicio de año, de post desastre alimenticio.
pero claro, aún queda turrón en casa, y polvorones, mazapanes, guirlache, alfajores... Y no hay que desperdiciarlos.
Bueno, pues no, mi vecina se pone a dieta y la acompañaré.
Lo que ocurre es que en realidad las fiestas por estos lares no finalizan hasta Reyes...Y hasta el día 11 no se reinicia el curso.
Pues nada, es un propósito para este año, y lo intentaremos. ¿Lo intentaremos?
Casi que lo dejamos una semanita más. ¿Qué les parece?
Y esto sin demoras. Reciclar ya lo hacemos.
El papel lo separamos, los bricks también, el plástico, las pilas. Responsabilidad ante todo. Aunque los contenedores estén llenos, que lo están. Aunque nunca se sepa a ciencia cierta si lo que nosotros separamos no lo vuelven a juntar.
Pero ahora tenemos un grave problema. Nos repiten machaconamente que no juntemos el vidrio con el cristal. Qué lío, madre mía!


Ella dice que tiene pesadillas, que ya no sabe si lo estamos haciendo bien o no.
Hay que asesorarse, pediremos cita con el asesor de reciclaje más próximo. Y no lo tomen a broma, queremos ser reciclantes conscientes.
Pero, tenemos el problema de la vajilla de la abuela, igual le damos un disgusto a la pobre, esos maravillosos platos, a lo mejor no son lo que parecen. Que no es lo mismo meissen que Rosethal, por poner un ejemplo.
Y eso no es nada, el verdadero problema es cuando por fin se rompe un plato horroroso de "duralex", además de recoger pedacitos durante horas (nunca se recogen absolutamente todos, y siguen apareciendo multiplicados y en los lugares más extraños). Pues eso, sigamos con el problema. ¿Donde los ponemos? Porcelana no son, cerámica tampoco... Serán vidrio, serán cristal.
Cualquiera sabe.
Y los de "arcopal ¿a qué contenedor deben ir?
Vale, ya nos enteraremos.


Les dejo con algo maravilloso, tierno, bonito, esperanzador.

Las primeras niñas gallegas de 2010 nacieron en los hospitales de
Vigo y Ourense mientras sonaban las campanadas de las 12 de la noche,
pesaron algo más de tres kilogramos y se llamarán Iris e Iria. Según aseguran la nena nacida en Vigo es la que nació como primer bebé español.

En Cataluña afirman:
El primer bebé nacido en España, es también una niña. Se llamará Graciela. Su mamá es de Guinea y el papá de Barcelona.

Que su mundo sea mejor cada día. Y que los mayores dejen de discutir incluso por los minutos y segundos de un nacimiento.
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Desde Vigo, como siempre, un cordial saludo. Hasta pronto.
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